Por qué la pelea fuera de pantalla de HAKARI y URAUME fue una oportunidad perdida

Tanto Hakari como Uraume son luchadores formidables con habilidades muy distintas en el mundo de Jujutsu Kaisen, y su inevitable enfrentamiento tenía a los fans entusiasmados.

Tras más de 30 capítulos de preparación, las expectativas estaban por las nubes ante lo que podía haber sido otro combate emblemático de la serie. Pero, sorprendentemente, Gege decidió saltarse el combate por completo, rompiendo los corazones de una gran parte de la afición. En su lugar, la historia salta directamente a las secuelas de la pelea con Sukuna.

Lo peor fue una breve escena en la que se ve a Uraume desvaneciéndose, lo que se da a entender que se debe a la derrota de Sukuna, no a la acción de Hakari. Para una serie como Jujutsu Kaisen, saltarse un combate como el de Hakari contra Uraume es un gran error, y he aquí por qué.

Por qué se esperaba tanto el combate entre Hakari y Uraume


Hakari contra Uraume se promocionó por varios factores clave, siendo el principal de ellos la enorme complejidad y potencia de la Expansión de Dominio de Hakari. El dominio de Hakari es sin duda una de las habilidades más enrevesadas y, posiblemente, rotas de Jujutsu Kaisen.

Su dominio funciona como un sistema de jackpot, convirtiendo el combate en una apuesta en la que cada giro puede darle una regeneración infinita de energía maldita, haciéndole prácticamente imparable durante un tiempo limitado. Es una habilidad tan intrincada y sobrepotenciada que los fans estaban ansiosos por verla puesta a prueba contra un oponente de alto calibre como Uraume.


Por otra parte, hace tiempo que se viene hablando de Uraume como uno de los personajes más fuertes de la serie. Al ser el único subordinado conocido de Sukuna, siempre se dio a entender que la fuerza de Uraume era superior a la de la mayoría. Sin embargo, a pesar de sus numerosas apariciones, nunca hemos visto a Uraume enfrentarse en un combate cara a cara.

Se suponía que Hakari contra Uraume iba a ser ese momento, una oportunidad de ver el poder y las habilidades de Uraume y cómo se enfrentaría al caos impredecible del Dominio de Hakari. Con el llamativo estilo de lucha de Hakari y la actitud estoica y sensata de Uraume, sólo el contraste entre sus personalidades habría hecho de este combate un enfrentamiento entretenido (quizá incluso mejor que el de Hakari contra Kashimo).

Por qué poner fin a la pelea entre Hakari y Uraume fuera de pantalla fue una oportunidad perdida


El final de Jujutsu Kaisen parece muy precipitado. Aún quedan un capítulo para el final, pero la forma en que se abordó el enfrentamiento entre Sukuna y Yuji fue… decepcionante. Claro que tenía sentido desde el punto de vista narrativo, pero quedaba la sensación de que se podría haber explorado más, sobre todo en lo que respecta a los personajes favoritos de los fans y sus historias sin resolver.
Un claro ejemplo de ello es la pelea entre Hakari y Uraume, una oportunidad perdida que podía haber dado más profundidad a ambos personajes y a la historia en general. ¿Por qué Gege decidió precipitar este combate? La respuesta podría estar en la Técnica Maldita (TC) de Hakari. El dominio de Hakari se describía, en términos sencillos, como una apuesta en la que tiraba los dados y, si tenía suerte, obtenía energía maldita inversa (ECA) infinita, lo que le hacía casi invencible.

Pero, por alguna razón, Gege Akutami complicó demasiado la ejecución. La explicación del dominio de Hakari abarcaba varias páginas, y su enrevesada mecánica era un quebradero de cabeza a la hora de coreografiar la batalla. Escribir otra secuencia detallada sobre el dominio de Hakari -especialmente en los capítulos finales- podría haber restado protagonismo al evento principal: la última batalla de Sukuna. Cada pequeño detalle de los dominios de Hakari requeriría un guion cuidadoso, y esto podría haber sido una distracción excesiva cuando la serie se acercaba a su final.

Una oportunidad perdida para desarrollar a Uraume y mostrar el verdadero potencial de Hakari


Aunque centrarse en Sukuna tenía sentido, dejar completamente desatendido el enfrentamiento entre Hakari y Uraume fue una gran decepción. Por un lado, el personaje de Uraume nunca recibió el desarrollo que merecía. Uraume ha sido reducido en gran medida a un «PNJ de hielo de fondo en el equipo Sukuna», con poca agencia o acción para solidificar su lugar en la historia.
Esta batalla podría haber sido el momento de dar cuerpo a Uraume, dándole la oportunidad de brillar y elevar su papel y explicando por qué merece ser el único subordinado de Sukuna. Sin ella, Uraume parece en gran medida irrelevante, y los fans se preguntan por qué se presentó como una figura formidable en primer lugar.

Para Hakari, este combate era una oportunidad de demostrar su valía de una forma que aún no había tenido. Gojo afirmó que Hakari podría alcanzar algún día su nivel de fuerza, elogiándolo junto a Yuta como uno de los pocos hechiceros realmente excepcionales de la nueva generación. Yuta incluso cree que Hakari podría ser más fuerte que él.

Pero mientras las batallas anteriores de Hakari mostraban su fuerza, su dominio hacía que la victoria pareciera casi demasiado fácil. Fue entretenida, claro, pero no el tipo de victoria trabajada y ganada que consolidaría su estatus como posible sucesor de Gojo. Un verdadero enfrentamiento con Uraume, alguien que pudiera empujarle hasta sus límites, habría sido el escenario perfecto para que Hakari se ganara ese reconocimiento.

En lugar de eso, los aficionados se preguntan qué podría haber ocurrido en los dominios de Hakari, y qué podría haber sido si Gege no se hubiera saltado un combate que tenía todos los ingredientes de un enfrentamiento clásico de Jujutsu Kaisen.