¿Quién es el verdadero ANTAGONISTA principal de ONE PIECE?

Todo viaje necesita un villano final convincente que ponga a prueba el temple del protagonista, y estos son los principales contendientes para el papel en One Piece hasta el momento.

Para una serie que lleva tanto tiempo en antena como One Piece, la idea de un final claro ha sido un factor importante para mantener la relevancia de la franquicia, One Piece ha podido mantener una sensación constante de progresión narrativa a lo largo de más de 20 años, ya que cada pequeño paso en el viaje va acercando poco a poco a la tripulación a sus objetivos.

Dicho esto, un viaje de proporciones tan épicas estaría incompleto sin un adversario al que enfrentarse al final, y la identidad del verdadero enemigo de Luffy es algo que el creador de la serie, Eiichiro Oda, aún no ha desvelado. Hasta ahora, hay unos cuantos candidatos convincentes para el título de antagonista principal de la serie, en función de las posiciones de poder que ocupan, sus inclinaciones ideológicas y sus conexiones personales con Luffy y su tripulación.

El caso de Sakazuki


Cuando concluyó la Guerra de Marineford, había muchas razones para que el almirante de flota Sakazuki -antes almirante Akainu- acabara siendo el último oponente de Luffy en su viaje para convertirse en Rey de los Piratas. Sakazuki fue el responsable de uno de los sucesos más traumáticos de la vida de Luffy, ya que mató a su hermano Portgas D. Ace ante sus propios ojos. Tras esta tragedia, Luffy luchó contra su dolor y su sentido de la vida.

Más allá de esto, la reputación de Sakazuki como hombre de línea dura, combinada con su visión extremista, lo han pintado como un villano en muchas ocasiones. Su firme e inflexible adhesión a la filosofía de «Justicia Absoluta» de los Marines le ha granjeado la ira de muchos marines de alto rango, como Garp, el almirante Fujitora y el ex almirante Aokiji.

Impulsado por un odio ciego hacia todos los piratas, Sakazuki se apresura a usar la fuerza letal y a menudo no toma prisioneros, representando la dura perspectiva que el Gobierno Mundial tiene hacia cualquiera que se atreva a desafiarles. Al derrotarlo, Luffy se vengaría por fin de la muerte de Ace de una forma casi poética.


A la inversa, Sakazuki también ha mostrado desdén hacia los Dragones Celestiales, a pesar de estar obligado a servirles, lo que indica que puede haber más en su carácter de lo que parece. En este sentido, podría no ser el último enemigo al que Luffy tenga que enfrentarse, y su papel en la Saga Final podría diferir de las expectativas actuales.

El caso de Barbanegra


Barbanegra es otro de los principales aspirantes al papel de antagonista final de la serie, y su caso es bastante más convincente por varias razones. Para empezar, los paralelismos entre Luffy y Barbanegra ya eran evidentes en el arco de Jaya, cuando fue presentado por primera vez.

A pesar de tener puntos de vista similares sobre la naturaleza de los sueños, la forma en que ambos piratas se esfuerzan por alcanzar sus objetivos no podría ser más diferente. La intrepidez, la temeridad y el fuerte sentido de la moralidad de Luffy contrastan con la cobardía, las estrategias cuidadosamente planificadas y los métodos engañosos de Barbanegra.


Además, como usuario de la Mítica Fruta del Diablo Zoan conocida como Hito Hito no Mi, Modelo: Nika, Luffy es portador de la voluntad del Dios del Sol Nika, encarnación de la alegría y la liberación. Por el contrario, Barbanegra es el usuario del Yami Yami no Mi, el más poderoso y siniestro de los tipos de Logia, y un heraldo de la oscuridad. Esto crea un intrigante simbolismo en el conflicto entre ambos, que puede ser una alegoría del conflicto entre el bien y el mal.

Ambos personajes llevan la sagrada inicial «D.» en sus nombres, lo que les convierte en portadores de la mítica Voluntad de la D. No se sabe mucho sobre la inicial y sus grandes connotaciones en la historia, pero sirve para reforzar los vínculos entre Luffy y Barbanegra.

Por último, Barbanegra fue también quien derrotó a Ace y lo entregó a los marines, lo que le asigna cierto grado de responsabilidad en la muerte de Ace. Esto, unido a su tripulación increíblemente poderosa y a su capacidad única de blandir dos Frutas del Diablo simultáneamente, lo convierte en un magnífico obstáculo final para el viaje de Luffy.

El caso de Imu


Existe una dicotomía desconcertante entre la poca información que se conoce sobre Imu y el hecho de que la mayoría de los fans de One Piece estarían de acuerdo en que posee el argumento más convincente para ser elegido como el antagonista final de la historia. Como líder de facto del Gobierno Mundial, Imu gobierna el mundo en secreto, desbancando en autoridad incluso a los Cinco Ancianos.

Durante mucho tiempo se ha rumoreado que Imu es un verdadero inmortal que ha ocupado el más alto puesto de poder desde el Siglo Vacío, lo que añade otra dimensión a su posible conflicto con Luffy. A pesar de haber permanecido confinado en las sombras durante la mayor parte del viaje de los Piratas del Sombrero de Paja, la Saga Final de One Piece ha tenido al Gobierno Mundial como protagonista, sobre todo en el Arco de Egghead.

La revelación de los poderes de San Jaygarcia Saturn en el Incidente de Egghead ilustró la existencia de habilidades que Luffy y su tripulación nunca habían encontrado antes, indicando que los Cinco Ancianos e Imu tienen otro nivel de poder. Esto crea un nuevo techo de poder al que Luffy debe aspirar, ya que su fuerza en el Gear 5 está casi a la par con la de algunos de los Almirantes y Emperadores del Mar.

Además, las conexiones entre Imu y el Siglo del Vacío, junto con su desdén por la Voluntad del D., hacen aún más intrigante un posible enfrentamiento con Luffy. En esencia, el acto de acabar con Imu y los Cinco Ancianos pondría fin a los 800 años de gobierno tiránico que el mundo ha experimentado bajo los Nobles del Mundo.

Con ello, Luffy demostraría su valía como sucesor de Joy Boy y traería la libertad al mundo, tal y como se había predicho. Por ello, Imu tiene actualmente más argumentos para ser el antagonista final de la historia, pero sólo el tiempo dirá si las cosas se desarrollarán así.